Alerta de ‘Micazo’ en la discusión del Plan de Desarrollo de Armenia

Alerta de ‘Micazo’ en la discusión del Plan de Desarrollo de Armenia

Actualización 14 de mayo de 2024: El alcalde de Armenia, James Padilla decidió reformar el proyecto correspondiente con su Plan de Desarrollo. El documento ahora cuenta con 19 artículos, convirtiendo por ejemplo, un plan de inversiones a largo plazo en uno de ellos. También entraron el capítulo independiente de inversiones con cargo al Sistema General de Regalías y 4 ejes estratégicos con sus correspondientes planes de ejecución. Desde El Cuyabran Post reconocemos la buena voluntad de la administración municipal y su apertura a las opiniones de la ciudadanía en este caso.

Vuelve y juega con otro de los proyectos de gran importancia para Armenia: el Plan de Desarrollo del alcalde James Padilla parece estar hecho para ser aprobado a pupitrazo. Luego de que la iniciativa de concesión de algunos servicios de Setta a un operador privado originara una polémica por la falta de rigor técnico con la que fue formulada (y siendo aprobada por los concejales amigos de la administración), es ahora el proyecto 011 de 2024, llamado a convertirse en la hoja de ruta de la ciudad capital, el que demuestra una ligereza apabullante en su composición: tan solo 9 artículos lo componen.

¿Cómo un plan de desarrollo puede estar consignado en tan pocos puntos? Acá está el origen del descontento de Germán Grisales, Jonatan Rojo, José Ignacio Rojas y Felipe Villamil, los 4 concejales declarados en oposición e independencia (los de verdad, obviamente no Álvaro Jiménez). Los corporados convocaron a una rueda de prensa para presentar las observaciones hechas al Alcalde pero que se concentran en una: frente a 9 artículos que se limitan a mencionar los títulos, existen más de mil folios de archivos anexos en los que se establece el contenido de peso.

“Como concejales solo tenemos la capacidad de modificar los artículos, mas no los anexos, de acuerdo con el artículo 118 del reglamento interno del Concejo (Acuerdo 215 de 2021) y la Ley 136 de 1994”, explica Grajales, “estamos hablando de cuestiones de metodología. Si solo podemos estudiar e intervenir en el articulado, pero cada uno de estos está amarrado a documentos sobre los que no tenemos facultades, por lo que aprobar uno solo de estos artículos representa darle viabilidad a proyectos grandes que necesitan y merecen un estudio riguroso”.

-¿Estamos hablando de un mico?- le pregunto.

-No es un mico, es cuestión de modificar el proyecto de acuerdo- me responde. Con el permiso del concejal, para El Cuyabran Post este es un mico del tamaño de King Kong.

La letra pequeña es la que cuenta

“En los proyectos de acuerdo, los documentos anexos suelen contener la memoria de los mismos, como el registro de las mesas de participación, o la consulta ante la CRQ y el Consejo Territorial de Planeación. Pero en este caso, los anexos traen los temas decisorios para la ciudad”, añade Grisales. Villamil, por su parte, enumera algunos de estos. “Nos preocupa, por ejemplo, que el plan financiero sea un anexo cuando claramente debe ser un artículo para poder discutirse; la Matriz Plurianual de Inversiones asciende a más de 3 billones de pesos, y esta encontramos la solicitud de un empréstito por $200.000 millones. Si aprobamos el articulado, estaríamos aprobando el empréstito, que está proyectado para pagarse a lo largo de 3 años: $100.000 millones para 2025, $80.000 millones en 2026, y $20.000 millones en 2027”, indica el corporado. 

Desde El Cuyabran Post hacemos la cuenta: en 2021 se le aprobó al ex alcalde José Manuel Ríos Morales un préstamo por $60.000 millones (de los que se habían ejecutado apenas $2.800 millones en enero de 2023), y en diciembre de 2022 recibió el aval para endeudar la ciudad en $20.000 millones más. En 2024 se adquirirá este crédito adicional, incrementando la deuda pública de la capital. “El costo del plan de desarrollo es de $2.7 billones, de los que el 60% o 70% de ese presupuesto es del Sistema General de Participaciones – SGP, con destinación específica para salud, educación y agua. La capacidad de inversión del municipio es mucho más limitada. Frente al incremento del recaudo del predial se esperaría que mejorara el escenario financiero, pero encontramos un nuevo endeudamiento. Necesitamos claridad de la capacidad financiera del municipio y de adónde van esas obras”, complementa Rojas.

Otra de las observaciones que tienen que ver con la parte presupuestal apunta a que la armonización del presupuesto –que es como se le llama al proceso de tomar los recursos que vienen del plan de desarrollo anterior se unen con los del nuevo y se redireccionan, de acuerdo con las necesidades percibidas- debería hacerse posterior a la aprobación del documento guía del gobierno de Padilla. Y ni idea, señalaron los corporados, de la destinación de la plusvalía estipulada en la modificación excepcional del Plan de Ordenamiento Territorial – POT, y que en el Plan de Desarrollo tampoco aparece.

El mico contempla también las obras

Curioso, por decir lo menos, resulta un documento anexo con 9 grandes proyectos propuestos por la administración, como una maloca indígena, un centro de bienestar animal, dos centros de apoyo a cuidadores y un cable aéreo. En este último caso, por ejemplo, no se sabe qué trayecto cubriría, qué población sería la beneficiada, cuánto valdría su implementación o de dónde saldría el recurso. Más curioso aún, saber que un punto de tanta relevancia no solo no está en uno de los artículos, sino en un parágrafo de uno de los anexos, conectado al artículo 6; de nuevo, sin posibilidad de poder entrar en estudio.

“Quisiéramos ver en la agenda de la ciudad cuál es el planteamiento concreto frente a los grandes temas del municipio: la asociatividad territorial (cómo trabajar con los municipios vecinos), cómo vamos a resolver temas de fondo como el agua potable y saneamiento básico, cuál es la posición frente al cierre financiero del Sistema Estratégico de Transporte Público -que es un tema de años atrás-, cuáles son las 4 obras priorizadas en la ejecución de la Valorización, la dinámica e incidencia del comportamiento del cobro de Predial con el catastro multipropósito”, indica Rojas.

Llama poderosamente la atención que, en todo el texto, no se nombra una sola vez a Empresas Públicas de Armenia – EPA, la prestadora de acueducto y alcantarillado cuya presidencia está en manos justamente del alcalde, y que por tanto, destina utilidades a la administración. Así como no se nombra, también se excluye de la exposición las metas de esta empresa en materia de infraestructura para agua potable y saneamiento básico, aunque en el empréstito por los $200.000 millones se han incluido dos créditos por 15.000 millones para estos temas.

Haciéndole ingeniería inversa al Plan de Desarrollo

Por su parte el concejal Rojo anunció que los cuatro independientes arrancarán, este martes 7 de mayo, una serie de visitas a Juntas Administradoras Locales para entrevistarse con la comunidad y verificar con ella si se ve representada en el proyecto de acuerdo; algo que era de esperarse dado que para la construcción del mismo se llevaron a cabo mesas de construcción con la ciudadanía.

“Los documentos y folios correspondientes a las mesas ciudadanas fueron radicados el 29 de abril, pero queremos abrir espacios de diálogo con los diferentes sectores y grupos poblacionales para que manifiesten sus dudas o propuestas. Queremos oír la percepción de las JAL, que no se han sentido reconocidas dentro de la formulación del Plan de Desarrollo; hay unas inconformidades frente a lo que presentaron los comunales, que parece no haber sido tenido en cuenta, y vamos a escuchar a los presidentes de estos organismos, para que en la discusión podamos incluirlos y solicitar la modificación a lo que dé lugar esas propuestas”, precisó.

Y es que con la radicación del proyecto, le queda a la Alcaldía y al Concejo un mes de pulso para lograr el aval que le permita al alcalde Padilla, empezar con su proyecto de ciudad. Minutos después de la rueda de prensa, desde la Alcaldía se soltó en redes un video en el que se subraya que en su construcción “cuenta con la nueva metodología implementada por el Departamento Nacional de Planeación, (SISPT), que facilita el estudio del articulado, dirigiendo la lectura a los anexos que se entregan con el documento y así dinamizar su lectura”. Pero esta no es la cuestión; los concejales de la oposición reconocen “el trabajo adelantado por el Gobierno, el esfuerzo, el cumplimiento con las instancias de participación legales y la metodología”, pero ratifican que no existe, tal como se entregó el documento al Concejo, manera de regular nada. Es de nuevo, firmar un cheque en blanco. Y por más que desde El Cuyabran Post queramos creer en la buena fe de sus compañeros de recinto, lo más probable es que se apruebe en una sola sesión, pasando por encima de cualquier argumento razonable. Desde acá huele a mico.

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